Primero debemos analizar qué es lo que lo diferencia del resto. La decoración nórdica es una decoración diseñada para dar luminosidad a la casa ya que se originó en países donde no había abundancia de luz natural. Los colores claros son los reyes en este tipo de decoración, se suele tender al blanco en paredes y muebles aportando el toque de color con los elementos decorativos. Sin embargo, podemos también apreciar cómo se incorporan toques en negro o diferentes tonos de gris para contrarrestar con el blanco.
La naturaleza está unida a este estilo, por lo que no pueden faltar las plantas de interior. El mobiliario tiene que dar la sensación de amplitud y sencillez utilizando líneas rectas y curvas suaves, siguiendo el estilo. Los materiales para la decoración tienden a ser maderas, algodón, lino, lana…como dijimos antes ¡todo lo más natural posible!